viernes, 18 de enero de 2013

¿Guarderías?

Me resulta imposible no llamarlo "guardería". A pesar de los vanos intentos por convencerme del eufemismo "escuela infantil".

Siento que "te guardo" allí. Y no porque quiera (te prometo que si tuviera opción no lo haría), sino porque no me queda más remedio.

Te llevo por la mañana, más temprano de lo que estás acostumbrada. Sales feliz a la calle, ¡cómo te gusta pasear!, ignorando a dónde vamos.
Después de una semana, parece que empiezas a conocer el trayecto y, a medida que nos acercamos, tu bella sonrisa va desapareciendo.
No puedes imaginar cómo me duele. Y allí te dejo, en manos de una "desconocida", llorando como jamás lo has hecho en tus 14 meses de vida, y me voy con el alma hecha añicos.

Durante estos 14 meses, papi y  yo hemos intentado evitarte cualquier tipo de llanto. Solo queremos que sonrías, que disfrutes la vida día a día, minuto a minuto, que recuerdes, cuando seas suficientemente mayor para recordar, esta infancia con la mejor de las sonrisas.

Y ahora, por pura obligación, somos nosotros mismos quienes te provocamos ese llanto desconsolado.

Intuyo que no entiendes nada, que ves cómo te dejamos rápidamente con esa chica (que sí, es simpática y sonríe, ¡pero no la conoces!) y salimos corriendo (casi literalmente).

¿Qué pasa entonces en tu cabecita? Seguramente, que desaparecemos para siempre. Eres demasiado pequeña para entender que solo nos vamos una hora. Demasiado bebé para comprender eso que tantas veces te repetimos ("ahora vas al cole solo un ratito, enseguida viene mami o papi a recogerte").

Pensar que te sientes abandonada hace que se me encoja el alma.

De nada sirven los "consejos" de familia y amigos:

- "Se acostumbrará, ya verás, solo es cuestión de tiempo..." (lo sé, lo sé, el problema es que YO no quiero que "se acostumbre" a conformarse)

- "La guarde les va muy bien, ya verás, aprenden mucho, "se socializan" (también aprende a mi lado, y pregunta si  quieres a quienes nos cruzamos en nuestros paseos si esa pequeñaja de ojos risueños que agita la mano con euforia al verles no es "sociable")

- "Así tienes más tiempo para ti" (¿cuándo entenderéis que yo soy porque ella existe? ¿que NO QUIERO más tiempo del que paso a su lado?)

- "Después será más fácil la adaptación al cole" (cuando vaya al cole tendrá 3 años, creo que entonces entenderá bastante mejor los tiempos y las ausencias. Además, odio ese empeño de los adultos por adelantar etapas. Los bebés son bebés, ¡ya tendrán tiempo para todo!)

En fin, que la sensación de abandono la tengo también yo, y el sentimiento de culpa, pues no creo para nada que tú lo necesites, está claro que la única que lo "necesita" soy yo (para que tú puedas vivir en condiciones, yo tengo que ir a trabajar).

Y aún deberíamos sentirnos "afortunadas". Haciendo filigranas, hemos conseguido retrasar este momento hasta ahora, los 14 meses. Los que mandan pretendían que "te guardara" a los 4.

Y luego dicen por ahí que ofrecer "ayudas" para las guarderías favorece la conciliación.

En fin...

6 comentarios:

  1. Caro ... Se me escoge el alma. Yo también las llamó guarderias porque es lo que son....como bien dices, dejemos los eufemismos.

    Está demasiado arraigado en la sociedad ese "despojarnos" de nuestros hijos... Yo estoy muy cansada de ver que no se entienda la conciliación sino bajo un único punto de vista : el productivo.

    Lo siento mucho por ti y por los cientos de familias a las que "los que mandan" y la "zoociedad" no nos deja mayores alternativas.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, Cata. Yo tb estoy muy harta de tener q seguir defendiéndome por querer criar a mi hija. No entiendo q eso sea lo "raro", cuando es lo natural. Y sigue estando mal visto, y siguen juzgando mi profesionalidad en base a mi reducción... Y está llegando un punto en q me empieza a dar igual todo. Sólo quiero ver crecer a mi hija. No es ningún crimen. Y si no les gusta, adiós muy buenas.

      Eliminar
  2. Lo siento muchísimo. Yo ge estado mucho tiempo buscando trabajo sin suerte, frustrada, deprimida... hasta que tuve a mi bebé. Él tambien tiene 14 meses y está todo el día conmigo, no lo cambiaría por nada.
    A mi también me han dicho a veces (cuando le dejo en casa de los abuelos para hacer limpieza general)eso de "Así tienes más tiempo para ti", aunque ya ves, q tiempo para mi (o para nosotros) son un par de horas de estar de "mierda hasta la coronilla" jejeje...Y tengo claro que no va a ir al "cole" con tres años y si siguen con los recortes y las reformas lo mismo con 6 tampoco :P

    ResponderEliminar
  3. Yo no paro de escuchar que porque no la pongo en la guardería, que ya tiene dos años y medio y todo el día con mamá no puede ser, que cuando empiece en el colé le va a costar más. Y a mi que, si cuando llegue el momento no quiere ir, cosa que dudo ya que se queda llorando todos los días cuando dejamos a su hermana y ella no puede entrar, pues no va. Seguro que cuando tenga seis años quiere ir al colé sin problema, porque a esa edad ya estará preparada para afrontar esa situación. Porque nos cuesta tanto comprender que nuestros hijos van madurando poco a poco y al igual que nigun bebe de seis meses esta preparado para caminar, tampoco están preparados para quedarse con desconocidos, y no es manipulacion, es supervivencia. Bueno, que me pierdo, bien es cierto que la situación económica que tenemos en la actualidad no es tan holgada como era antes, pero la riqueza emocional que tenemos ahora no la cambio por nada, el poder disfrutar de mis hijas todo el día no lo cambio por nada.

    ResponderEliminar
  4. Totalmente de acuerdo. Solo puedo enviarte energía positiva para poder superar estos momentos ...duros. ¡ Para cuando una conciliación para nuestros hijos e hijas! El pasar mas tiempo con papá y mamá no debiera depender de la "suerte" sino de unas políticas de conciliación y educación adecuadas.

    ResponderEliminar
  5. Eso depende de la edad, del niño y de la guardería, yo creo que la mejor edad es a partir de los 2 años, mi niña me pide ir por la noche de lo bien que se lo pasa, faenas tengo de llevármela al mediodia a casa y en cuando la dejo se me va sin decirme nada, le tengo que pedir el beso, que eso si, viene y me lo da feliz, y en cuanto me voy desde el otro lado de la ventana con una sonrisa de oreja a oreja me dice adiós. Yo era anti guardes, pero al final la tuve que llevar, a los 18 meses, creo que le falto un poco más de tiempo, pero se adaptó fácil gracias a la maestra. Si volviera atrás la volvería a llevar, pero eso si, a partir de los dos años que es cuando su celebro esta desarrollado para separarse de ti.

    ResponderEliminar