martes, 30 de septiembre de 2014

¿Paramos el mundo?

Tengo ganas de que todo se normalice y pueda cumplir con mi propósito de todos los días: estar. 

Vivir cada día, no pasar por encima. 

Sentir que vivo, no que paso de largo.

Cantarte historias sin prisas. (No, no me equivoqué. Cantarte, con A.)

Dejar de quejarme y sonreír con ganas. 

Estoy cansada de llegar corriendo a todas partes, de no saborear instantes. 

Quiero besarte despacio, que se pare el mundo y quedemos sólo nosotras. Que nuestro abrazo sea más largo de lo habitual.

No tener siempre en mente ese "llego tarde", "no llego", "estoy agotada". 

Que no me hablen de conciliar quienes sólo piensan en su silla. 

Que no me den lecciones, que no me vengan con sus "más vale calidad que cantidad". 

Que no pretendan engañarme, en la vida sólo puedes centrarte en una cosa si tienes intención de poner la piel. Estar en todas partes sólo te lleva a NO SER en ninguna. 

Yo quiero parar el mundo, bajarme, perderme si hace falta, pero contigo. 

No quiero que llegue el fin y arrepentirme de no haber saboreado el camino.

Lenta, tranquilamente, de verdad.

A tu ritmo, no al que me marcan desde fuera. 

¿Paramos el mundo? 


7 comentarios:

  1. ¡Páralo! Claro que sí =)

    Y yo discrepo bastante en lo de más vale calidad que cantidad. Los niños necesitan que estemos con ellos, y cualquier cosa les hace felices a tu lado ;)

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  2. Mi preciosa Carol:

    cuando consigas pararlo, avísame, yo quiero hacerlo también y no encuentro la forma. Estoy al borde de la lágrima leyéndote porque vivo cada una de tus experiencias, esas que transcribes aquí, las que desearía que sólo fueran frases pero sé que son afiladas y reales como las mías. No sé qué le han hecho los niños a esta sociedad para privarles de lo más preciado que tienen en sus primeros años de vida: sus padres. No sé cuando los adultos perdimos el norte y decidimos que eran necesarias tantas cosas materiales. No sé quién se inventó la gilipollez (perdona la expresión, pero me altera en extremo) de la calidad, necesitamos de ambas, no sólo de una, cantidad de tiempo con calidad. Mi niña, ojalá encontremos la forma de movernos todos los que, como tú, estamos más que hartos de este statu quo. Mientras tanto, estoy contigo, a pesar de los kilómetros, siempre.

    Te Loveyou princesa.

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  3. Hubo un post, ahora no recuerdo bien si fue uno de los tres "viernes dando en la nota" o uno aparte en el que gritaba "paren el mundo, que me quiero bajar!", así que fíjate si te entiendo!...y eso que yo dispongo- por decisión- de más tiempo en cantidad y calidad para mis hijos, pero igual no me basta... Y no tanto por mi sino por sus horarios... Y es una de las cosas quye más disfruto de éste nuevo cole, que hemos ganado una hora para nosotros...

    Para el mundo si así lo deseas! Si es tu sueño y tu motor... Arriesga sólo así podrás saber si valió la pena tomar el riesgo... Pero ten en cuenta que tomes la decisión que tomes, siempre estaremos de alguna manera regidos por EL TIEMPO! Besos

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  4. Solo tú puedes pararlo. Bajarte de él y no permitir que os roben más abrazos largos, o más canciones... Seguro que es un paso que cuesta mucho dar, no lo dudo, pero tampoco dudo que encontrarás la manera de hacerlo, Carol, de vivir a tu niña lo más intensamente que puedas, y con calma, sobretodo con esa calma que tanto quieres.

    Hacía mucho que no te leía, me alegro de haber cogido un rato el ordenador y poder haberlo hecho. Un beso grande. Muaaaaak!

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  5. Sin palabras... Tanto tu post, como el comentario de Let...
    Y como dice Cata, al final siempre nos falta tiempo...
    Pero esa sensación de tener que hacer las obligaciones, por eso, porque son obligaciones, aunque no nos gusten, y no poder disfrutar de lo que amamos... Eso nos quema por dentro.
    A mi me entristece tener que meter prisa por las mañanas a mi peque, cuando lo que nos pide el cuerpo es desayunar tranquilas, riendo y con abrazos. Me entristece no poder irla a recoger a la guarde y poder tener una conversación con la profe para ver como ha ido el día... Y sobre todo me entristece saber que yo soy de las afortunadas que pasa con ella un buen rato de tarde. Cuando esto, por lo menos, lo deberíamos disfrutar todos...
    Espero que logremos parar un poco el mundo... Sino, yo, me bajo!
    Un placer leerte, como siempre.
    Muacks!!

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  6. Hoy justo escribía del tiempo en mi blog, a mi se escapa y a veces también quiero pararlo para disfrutarlo de nuevo. Te entiendo no sabes cuanto.
    Paralo por un instante y arriesga, igual vale la pena apostar por ello. Un beso!

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  7. Solo decirte que pares el mundo cada vez que lo necesites, al fin y al cabo un un abrazo de tu niña es lo que mas te va a llenar...
    Entiendo tu sensación de estar en una ruleta tipo hámster de la que nunca llegamos a bajarnos... Que triste sensación...
    Animo muchachita, besa y achucha a tu princesa, ese será la vitamina q te ayude con todo lo demás.

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